viernes, 15 de marzo de 2013

La renovación de la atención primaria desde la consulta, libro de Juan Gervas



La renovación de la atención primaria desde la consulta, de Juan Gervás y Josep Casajuana.

Se trata de un libro, que se puede descargar libremente desde esta Web: http://www.upf.edu/catedragrunenthalsemg/publicaciones/coleccion_catedra.html

En el mismo, se realiza uno de los análisis más lucidos, prolijos y transparentes de la actual situación de la sanidad en España, y más en concreto de la denominada Atención primaria.

Esta coordinado por Juan Gervas, un médico singular: uno de esos personajes heroicamente ejemplares, que surgen de vez en cuando, en esta "piel de toro",  y que son como una mezcla de Don Quijote, San Juan de la Cruz y Manolete.
El análisis no puede ser mas certero y racional, y los argumentos mas lucidos y contundentes. 

Solo nos queda una duda: 
¿Basta la racionalidad, la verdad  -e incluso  la "Verdad"-  para resolver un problema social de estas dimensiones?
  ¿Lo podemos -y debemos- hacer solos los médicos, es decir forma parte de nuestra misión profesional y social, tambien la organización de un sistema sanitario?
Por desgracia, pensamos que hay tiempos históricos o situaciones sociales patologicas, donde la Verdad y la realidad son bienes de escaso valor, suele coincidir con crisis o derivaciones sociales.

 Sí creemos, que forma parte de  nuestro cometido, como agentes sociales de la salud,  tratar de señalar los errores o desviaciones de un sistema sanitario del que somos protagonistas principales, y que afecta a la salud de la población, con objeto de mejorar el funcionamiento del mismo.

Pero por desgracia muchos creemos, que aun nos falta por definir y asumir una dura y cruda realidad:  que la solución mas eficaz y eficiente a cuantas aberraciones y desviaciones tiene nuestro sistema sanitario, y mas en concreto la "Atención primaria", pasa, invariablemente por la actuación de la Justicia.

domingo, 10 de marzo de 2013

¿Porque en España se come peor pan ?



Se trata de una pregunta, deliberadamente provocativa, y  la hacemos a la vista de una realidad: más del 70 por ciento del pan que se consume en Madrid (y una gran parte del que se consume en España) es pan ya precongelado, precocido y prefermentado.
El resultado es un pan que se endurece como roca o metal, a las pocas horas, con un sabor y una textura peculiar que hace que se deshaga en la boca como la arena de la playa.
Y si además es sometido a nueva congelación y recalentamiento, el resultado puede ser aun mas explosivo, pues parece indistintamente plastelina o goma--2.

Eso si, es un pan que da el pego” recién vendido, pues tiene buena imagen y se puede servir como recién sacado del horno, tan solo hay que dorarlo unos minutos y ya esta.

Cabe tambien la posibilidad de que el pan que se adquiera no sea precongelado sino pan industrial (menos del 30%,) pero en  este caso el resultado no es mejor, pues lleva tantos complementos y suplementos panarios sustitutivos de la harina, que hacen de el, mas un producto de ingeniería alimentaría.

Tan solo en algunos núcleos rurales de España, es posible hoy en día, seguir degustando el pan tradicional, hecho con los ingredientes de siempre: harina, levadura, agua, tiempo, y el quinto y mas importante: el trabajo y espíritu de sacrificio del ser humano entendido este, como servicio a los demás y como contribucion a la perfección de la naturaleza y honra a su Creador.

Resulta paradójico que habiendo sido España, tradicionalmente, el granero de Europa (por las dos Castillas,  Andalucía, etc.), y seguramente el país con los mejores campos y el mejor sol para el cultivo del trigo;  
Sin embargo, en la actualidad  -y no es broma-  mas del 80 por ciento del trigo que se consume en España, es de origen ruso: un trigo que no conoce el sol sino de pasada o de referencias, y que tal vez todavía sigue perfumado con la suave brisa de  Chernovil.
También extraña, que esto ocurra en el país con una mayor herencia de las tradiciones greco-latina, árabe y judeocristiana, culturas forjadas alrededor del trigo, por ello se habla de la civilización del trigo en contraposición con la del maíz de América y todas sus culturas mayas y precolombinas.
Sin embargo es en todos los países latinoamericanos, y  especialmente en México, donde hoy en día, se puede degustar quizá el mejor pan del planeta: un pan exquisito, amasado durante las horas necesarias, trabajado durante la noche y el día, que ha fermentado durante el tiempo  -y "solo" con los ingredientes-,  que la naturaleza requiere.
Siendo las panaderías autenticos templos gastronomicos o talleres artesanos, donde se funden en la masa, el trabajo creativo y fecundo del hombre con los frutos que ofrece la naturaleza.
(Curiosamente casi todas las panaderías son regentadas por españoles que emigraron a esos países, hace una o varias generaciones.)



¿Pero a que se debe esta nueva moda? ¿Porque, como y cuando se impuso?

Como todas los cambios que conllevan perdida de calidad o cualidad de vida, tal vez sean signos de patologías sociales: y mas aun cuando se trata de un alimento tan simbólico como "el pan nuestro de cada día".

En la respuesta quizas influyan muchos factores, como la desvalorización del trabajo, entendido este como servicio social, espiritu de sacrificio y valoración de la obra bien hecha, transformado tan solo como un medio rapido de enriquecimiento personal.
(Parece que ya solo van quedando algunas especies sociales raras, como los médicos, etc, en los cuales prima en su trabajo: el espiritu de sacrificio y su vocación de servicio.)

Aunque tal vez se halle detras, una sociedad en crisis -no solo economica-, en la que hay una sobrevaloración de las apariencias mas que la realidad, la imagen mas que el contenido, la cualidad mas que la calidad, y la oscuridad mas que la Verdad.
Tal vez no sea ajeno a esta deriva social, otras corrientes como la denominada nueva cocina, forjada tan solo en base a las apariencias, el marketing y la manipulación extravagante de los alimentos.

domingo, 3 de marzo de 2013

Los Médicos de A. Primaria: calificados como objetos de consumo





 Uno de los signos externos mas llamativos y representativos de la actual situación de la sanidad en España, y mas en concreto de la atención primaria en Madrid  -ademas de signo patognomónico de la degradación del acto médico- es la existencia en Internet de portales especializados, donde se califica desde el anonimato, a los médicos de atención primaria,  de la misma forma en que se hace la valoración de una aspiradora, lavadora, vehículo o cualquier otro objeto de consumo. 

Curiosamente no existe hacia otros colectivos sanitarios o extrasanitarios, como enfermería, administración, etc, entre otras razones porque quizás se sepa, que estos colectivos si gozan de protección legal y real, tanto de los sindicatos como de las asociaciones que los representan.
Tampoco se realiza hacia otros médicos especialistas o de hospitales, tal vez por la misma razón.
Hay que decir que, las mas de las veces, además de aportar información, tan solo sirve como medio de expresión del resentimiento de quien no ha obtenido lo que deseaba o  atendido en la hora citada: no se le dieron los fármacos que pedía, la baja que solicitaba o cualquier otro motivo, casi siempre ajeno a la labor propiamente clínica. 
Ni que decir tiene, que existen otras vias legales mas eficaces e inmediatas para expresar disconformidad, malestar o abiertamente denunciar lo que debe ser corregido o sancionado.

Teniendo en cuenta la actual situación de acoso laboral institucional que padece el médico de cabecera o atención primaria, en nuestro país, que debe atender a menudo, a mas 40 o 50 pacientes sin descanso y en menos de 6 minutos cada uno, asumiendo además en ese tiempo, labores de celadores, administrativos, enfermería, informáticos, etc,..  se trata tal vez, de una vuelta de tuerca mas, en su actual indefensión socio- laboral.

Y es que, hechos o realidades como estas, son signos patognomónicos de la degradación social del acto médico y la despersonalización de sus dos principales protagonistas: el paciente ya transformado en cliente, y del médico: en objeto burocrático repartidor de tickets varios.


Lejos de parecer una anécdota , creemos que se trata de algo mas grave y profundo, pues ademas de retratar una realidad social patológica, se ataca un valor básico e imprescindible en la relación medico-paciente como es el prestigio del médico, sabiendo que éste, forma parte de la propia eficacia terapéutica del acto médico.

Afortunadamente existe un espacio inviolable en la relación medico-paciente que es, la mas de las veces, inacesible a la manipulación social
Es esta la grandeza del ser humano, que posee siempre la capacidad innata para ver y sentir la Verdad
 

A este respecto, nos decía nuestro maestro humanista Dr. Gregorio Marañón:

 "La Medicina vive de su indudable eficacia, cada día mayor; pero vive también y actúa beneficiosamente gracias a su prestigio, al mito de su eficacia, que es parte del honor profesional.”
"Cuidar ese prestigio es obligación primordial de los médicos, sin mas limitaciones que las que impone la salud del enfermo y la propia conciencia"