sábado, 7 de mayo de 2022

Cervantes y Marañón: compañeros "de obra y de ruta"


Gregorio Marañón visitando un molino de viento de la Mancha.

Marañón no podía dejar de sentir aquí, la cercana presencia de "Don Quijote" y por ello la de su "compañero de obra": Cervantes. 

Sabía, como “su compañero de ruta”, que el molino no es solo eso: es esfuerzo, dolor, belleza y templo a la naturaleza: es el gigante del alma generosa de quien así quiere verlo

No es un gigante, es el hombre.

No son aspas, son sus manos.

No es el viento, es el cielo.

No es Don Quijote, es el poeta.

 

Al hablar de Cervantes necesariamente surge su obra eterna y universal Don Quijote, que así mismo es reflejo de su personalidad.

No hace falta recordar la influencia de esta obra en la humanidad, pues no en vano se trata del libro mas traducido después de la Biblia, es por ello que han sido numerosísimos los intelectuales a traves de la historia, que la han estudiado,  y cada uno desde su propia percepción de la realidad, plasmando matices diferentes. 

Solo por citar a algunos: Ortega y Gasset, Azorin, Lain Entralgo, Dostoievski , George Orwell, Rubén Darío o el mismísimo contemporáneo suyo William Shakespeare dejó constancia de la influencia quijotesca en su obra Cardenio,  al igual que mas tarde Voltaire en Cándido,  pero entre todos ellos nos quedamos especialmente -por su hondura y clarividencia- con las de Unamuno, Dostoweisky  y Marañón.

Y es que tal vez fueran estos, los que mas asemejaban su alma con la del autor Miguel de Cervantes, por eso titulamos como "compañeros de obra y de ruta" o dicho en el lenguaje coloquial "currantes del mismo curro": en la construccion del edificio eterno y universal de la Dignidad humana.

Nos centramos en nuestro maestro Gregorio Marañón, suyas son estas palabras referidas a Cervantes y el Quijote:

“Quizá el pensamiento que con mayor frecuencia inspirara fue la compasión (…).

¿Dónde estaba pues su genialidad? Porque lo seguro es que fue un genio: pero su genialidad reside en la abundancia de su vida; en que su vida, igual en apariencia a la de todos, precisamente por ser igual a la de todos, desbordaba de lo más eficaz, que no son las aptitudes, sino la humanidad .Y la abundancia de vida depende de la abundancia del amor. Y esta abundancia de vida, creada por el amor, es la fuente más eficaz de la creación”. 

(…) Quijotes de la verdad (...) y es que exigimos la verdad, pero casi nunca la soportamos. Por eso he escrito alguna vez que el mérito de la verdad no es casi nunca de quien la dice, sino casi siempre de quien sabe escucharla.       

De su libro Vocación y ética, 1953, OC., IX, 352 

El Quijote, como muy pocos libros de su categoría, nos enriquece por dentro"

Ésta es la razón de que sea el libro preferido de los hombres que tienen vida interior profunda; por eso es también libro de la adultez para arriba, cuando lo de fuera empieza a interesarnos menos cada vez; por eso, en fin, es el predilecto de los seres humanos a los que se ha amputado una parte del mundo exterior; es decir los ciegos. Los ciegos dan la medida exacta, porque la mayor parte de su vida es sueño”

(…) “Otra consecuencia de esa actitud del español, clave de la psicología de su decadencia, es la pérdida del espíritu de sacrificio, de la fe en el ideal generoso; la muerte, en suma, del quijotismo”.


2 comentarios:

  1. Cervantes y Marañón, dos genios hispanos de los que sentirnos orgullosos. Nos harían falta, amigo Juan Francisco, en estos tiempos frívolos y vacíos.

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  2. Gracias amigo Jose, tienes razón vivimos tiempos dificiles aunque quizas no menos -al menos por ahora- que los que les tocó vivir a estos dos grandes maestros.

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