Siguiendo con la iniciativa de "Siete principios para ser un gran médico",  podríamos enumerar también algunos principios que se precisarían para  ser un buen paciente, lo que conlleva a hacer mas fecundo y eficiente el  acto médico.
 Y como siempre, lo haremos de la mano de los grandes maestros humanistas de la Medicina universal como G. Marañón. 
Antes  de nada, debemos admitir que no resulta fácil, hoy en día en España, ser  pacientes y comportarse como tales puesto que la enfermedad social de  la sanidad también les afecta, y en mayor grado, a ellos. 
Pero tener presentes estos principios, tal vez ya sea una forma de combatir lo que parece una plaga social. 
Los principios confluyentes podrían ser estos:
1- Confianza en el médico.
A este respecto G. Marañón nos iluminaba con estas palabras:
"  Obedecer es siempre empezar a curarse".  Un medico modesto al que se  sigue con fe es mucho mas util que un gran profesor al que se discute.” 
 "Hay  siempre muchos médicos entre los que elegir. ..cada enfermo debe elegir  el suyo. La socialización de la Medicina facilita hoy esta elección. 
Pero, una vez elegido, no debe descutirsele, y esto si que lo ha empeorado la socialización de la Medicina."
2- Conciencia y valoración del acto médico
 Sabiendo  que la Medicina no es una ciencia exacta pero si lo es, que el Medico  ponga todo cuanto esté en su mano desde el punto de vista ético,  profesional y humano.
"Generosidad absoluta, esto es lo que hace respetable la actitud del medico" 
 "La Medicina es como profesión excelsa, pero como ciencia humildísima, y hay que aceptar esta insuficiencia y esta humildad en gracia a esta excelsitud"...   
  "Pedir cuentas al medico de su fracaso con un criterio científico, como  se le pide a un ingeniero que ha calculado mal la resistencia de un  puente, es disparate fundamental y es principio inaceptable".   
                                                                                                     
                                                                                                   *G. Marañón
3- Responsabilidad personal: asumiendo que no solo hay derechos sino también deberes, personales y sociales.
 Esto incluye hacer un buen uso de los servicios sanitarios, evitando " borracheras y alucinaciones " por la "barra-libre sanitaria".
"Si  el haber vivido sólo      para los deberes crea en el hombre un  sentimiento de esclavo, el anhelo de      no tener más que derechos  convierte al hombre en un demonio insensible y      cruel que sólo  acierta a dirimir sus dificultades por la fuerza”.       
                 *Gregorio Marañón
4- Respeto a la Dignidad humana, también la de otros pacientes.. también la del medico, reconociendo su humanidad.
Sabiendo  que la Dignidad humana no depende de las circunstancias:  color de  piel, edad, salud, sexo, status, hallarse dentro o fuera de su país.. o dentro o  fuera de su madre.
5- Conciencia de la realidad social asistencial: lo que conlleva a la responsabilidad personal.
Esto  es difícil en España hoy en día, pues -por estrategia política y  electoral- se ocultan las listas de  pacientes en las consultas de A. Primaria, ignorando estos el tiempo que disponen ( unos 5 minutos) y  las condiciones infrahumanas de asistencia en las consultas.
Esto incluye tambien la comprensión de que el tiempo de espera en las consultas, no se puede cuantificar a priori de manera autómata.
6- Ser concretos en la consulta 
No aprovechando ésta, para consultar por mera curiosidad, miles de motivos banales ya pasados y superados.   
Todos estos principios se podrían resumir en uno:
7- "Saber ser pacientes"
 
El enfermo o “paciente”:   preciso llamar "nominal", el que soporta o sostiene el peso del  sufrimiento y el dolor, que es patrimonio de toda la humanidad.. ,  concepto tan distinto del de "usuario", mas cercano al objeto y por ello manipulable y  sustituible.
Hay que intentar recuperar el significado de " paciente" cuyo concepto ha sufrido una mutación política en España, pasando de paciente a usuario y a cliente  ( y antes votante)... 
Ello  significaría una revalorización de la salud, de la persona, del trabajo  y de la vida ... en definitiva de la Dignidad humana

