sábado, 1 de marzo de 2014

El prestigio universal de "ser médico"



Se lo decimos a menudo a los jóvenes estudiantes de Medicina que acuden, en prácticas, a nuestra consulta:  "Una de las cosas más gratificantes que podemos sentir, tanto a nivel profesional como personal, es constatar y vivir en primera persona, el prestigio social de  “ser médico”

Se trata de un prestigio general que se puede vivir en cualquier lugar o circunstancia, y no es artificial ni espúreo como el de la fama o el dinero, sino que es de naturaleza mas profunda y universal, tal vez porque deviene fundamentalmente de la raíz misma de la profesión: que es la generosidad y la vocación de servicio.

Y ello, a pesar de los errores de una ciencia que es, y será siempre, inexacta,  y las cargas de profundidad autolíticas de aquellos compañeros que caen seducidos por intereses  económicos y comerciales, o abducidos por ideologías políticas que justifican atentados contra la dignidad humana.


un enlace

Y es que, como ya dijimos: "No existen fronteras para el medico: su pasaporte es universal, carece de caducidad y tiene una sola nacionalidad: la Humanidad".

 O como nos dijo nuestro maestro Gregorio Marañón:
"Este hombre recto, pacifista que prefiere morir por la paz a conquistar la paz con la guerra, es casi siempre un medico.
.. El medico, en la guerra, es el único que no quiere matar, el único para quien no existe el enemigo, porque no hay enemigo capaz de esconderse dentro de un hermano".              

martes, 25 de febrero de 2014

El fallo mas grave y peligroso del sistema informático de AP-MADRID



Un ejemplo que muestra como, a veces, el progreso tecnológico puede producir un retroceso social, es la introducción de la informática en las consultas médicas de atención primaria.
Y no tanto por la propia tecnología informática, que en si misma es útil y valiosa, sino porque en su aplicación se ignora o desprecia el factor mas importante: EL TIEMPO,  y por ello lleva la firma inequivoca de la  IRRESPONSABILIDAD.

Es lo mismo que si en el AVE se trata de recorrer un trayecto o una curva en menos tiempo del posible y sobre vías de ancho incorrecto...  todos sabemos desgraciadamente lo que ocurre.

En este sentido, el último sistema informático AP-MADRID es una vuelta de tuerca más, en la dificultad para atender al paciente.
Si para realizar una receta a mano se precisaban 10 segundos, ahora son necesarios unos 2 minutos, teniendo en cuenta que habitualmente son varios fármacos para tratar cualquier patología, vemos que solo para realizar el acto mecánico de hacer recetas se precisan mas de  6 o 8 minutos, si añadimos el tiempo necesario para el registro clínico de los episodios, la lectura de su historial, manejar impresora, papel, etc... vemos que sumarian mas de 20 minutos.
Teniendo en cuenta que el sistema solo permite menos de 6 minutos para atender a cada paciente, es fácil deducir el colapso y el peligro que supone para la salud publica, incluida la del médico.

Pero la mayor perversión del sistema viene precisamente porque se elimina el tiempo necesario para la inspección, anamnesis, exploración del paciente, para la explicación de los tratamientos...  porque se impide mirar al paciente.
Y es que, debemos recordar que la degradación del acto médico conlleva inexorablemente a la desvalorización de la salud.. de la vida, y por ello de la propia dignidad humana.
Por lo demas, casi todos los errores del sistema AP-MADRID derivan precisamente de esta perversión inicial: la ausencia de tiempo, aunque existen algunos mas singulares que expondremos  mas adelante.

Dado que detrás de todo esto, solo está el vacío y la irresponsabilidad, seguimos creyendo que la via judicial es la única opción posible para resolver la grave problematica de la atención primaria de este pais.


sábado, 22 de febrero de 2014

¿PORQUE FRACASÓ LA PRIVATIZACIÓN DE LA SANIDAD EN MADRID?


Tal vez ya ha pasado tiempo suficiente para analizar con perspectiva, lo que ocurrió en la sanidad de Madrid
Y ante la pregunta ¿PORQUE FRACASÓ LA PRIVATIZACIÓN DE LA SANIDAD EN MADRID?
La respuesta más sencilla e inmediata es: porque -como en las guerras- frente a la ofensiva privatizadora, venció la defensiva por la sanidad pública.

Pero si profundizamos mas, podemos descubrir tal vez los motivos mas ocultos de esta guerra y por tanto las claves de la derrota; y es que, al margen de la espuma política que ha rodeado toda la confrontación y que ha abanderado esta guerra, creemos que la gran clave para entender el fracaso de esta reforma privatizadora y la respuesta es: 
Porque estuvo hecha -tanto en las formas como en el fondo- desde el resentimiento, y por tanto con un fuerte componente destructivo.
Con un desprecio absoluto hacia los profesionales, especialmente a los médicos: con su cosificación, vejación y desprecio y por tanto también hacia los pacientes; Y con la imposición de un modelo basado en un darwinismo social salvaje.
Y como signo patognomónico: una fobia singular hacia “los funcionarios”

Pero para entenderlo mejor, tal vez debemos enfocarnos en los dos personajes que han personalizado esta ofensiva: 
- Uno, el gran instigador o inspirador en la sombra: un “jesusgil”  de la gestion sanitaria, médico de pueblo frustrado que pervierte su vocación por la de gestor económico y administrativo de centros, y que tras no aprobar ninguna oposición al parecer, consigue realizar su sueño y superar su frustración subiéndose a una plataforma política, y desde ahí dar rienda suelta al resentimiento enfocado en sus ex-compañeros: sobre todo ”funcionarios”, catedráticos y jefes de servicio de hospitales.

- El otro, un joven político con la prepotencia caracteristica que suelen tener en España algunos que poseen apellido italiano o catalán, que tras no superar tampoco ninguna oposición, consigue subirse a la misma plataforma y envuelto en soflamas politicas radicales, dar vía libre de expresión al resentimiento.

Pero la pregunta también podríamos formularla al revés: ¿PORQUE VENCIÓ LA DEFENSA DE LA SANIDAD PUBLICA?:
 Aunque sin duda, la estrategia de movilización fue útil para crear un ambiente social adecuado, pero creemos que la gran clave de esta victoria fue sin duda el “arma secreto” utilizado: LA VIA JUDICIAL, y tambien el hecho de que los protagonistas principales del uso de dicho arma fueron los propios profesionales.

Desde este pequeño balcón, seguiremos clamando y proclamando que los gravísimos problemas de la atención primaria en España (casi todos ellos ilegales) solo se resolverán cuando se utilice este "arma secreto defensivo".