Para quien no la haya visto, nos referimos una vez mas, a la conocida película
“Atrapado en el tiempo” en la que el protagonista amanece todos los días con la
misma realidad vital, los mismos
personajes y en el mismo día "de la
marmota” atrapado dentro de una situación vital
de la que no puede salir.
Mucho nos tememos que un año más, como desde hace varias decadas, la Atención primaria seguirá en su “año de la
marmota” con los mismos problemas: idénticas quejas de pasillo y de blog ,
los mismos protagonistas, y sobre todo: la
misma ausencia de respuesta de nuestro colectivo profesional. O lo que es lo mismo: el mantenimiento crónico de todo un sistema parasitario que se sustenta en torno a la explotación del médico de familia y el maltrato también del paciente (aunque el primero no lo asuma y el segundo no lo sepa)
Y continuara el secreto mejor guardado por la prensa pesebrista a las masas abducidas por los políticos, con el mantra de tener UDMSSDM (uno de los mejores sistemas sanitarios del
mundo) por ser “gratuito”.
Y ese secreto es: que
el tiempo disponible para atender en consulta medica a los pacientes, incluidos niños, es de menos
de 5 minutos por paciente, y que durante ese escaso instante el medico debe simultáneamente
manejar un complejo sistema informático irracional,
inoperativo y peligroso porque favorece el error.
Todo lo cual dificulta y de hecho impide la exploración y la correcta labor clínica y asistencial Lo que supone un grave riesgo para la salud publica.
Todo lo cual dificulta y de hecho impide la exploración y la correcta labor clínica y asistencial Lo que supone un grave riesgo para la salud publica.
Por otro lado, en el nuevo año, parece que continuaran los mismos personajes de la película:
aquellos que conforman todo el escenario y argumento, nos referimos a todo el complejo parasitario que gravita en
torno a la explotación del médico de familia:
Aquellos para quienes los Centros de salud siguen siendo laboralmente centros de ocio y relax, eufemisticamente llamados “centros Marina-dor” siendo el destino ideal para disfrutar de los últimos años antes de jubilarse, pues más se parece a prejubilación anticipada, con consultas relajadas a menudo de 3 o 5 pacientes por día y sin asumir apenas responsabilidades. Y un ejército de personal administrativo, algunas veces muy valioso y resolutivo, pero a menudo más parecido a máquinas de autoservicio de tikets y frecuentemente constituidos por miembros de una misma familia que se reparten el trabajo público como botín ( paradojicamente si se hiciera desde cualquier otra institución sería considerado delito y tráfico de influencias).
Aquellos para quienes los Centros de salud siguen siendo laboralmente centros de ocio y relax, eufemisticamente llamados “centros Marina-dor” siendo el destino ideal para disfrutar de los últimos años antes de jubilarse, pues más se parece a prejubilación anticipada, con consultas relajadas a menudo de 3 o 5 pacientes por día y sin asumir apenas responsabilidades. Y un ejército de personal administrativo, algunas veces muy valioso y resolutivo, pero a menudo más parecido a máquinas de autoservicio de tikets y frecuentemente constituidos por miembros de una misma familia que se reparten el trabajo público como botín ( paradojicamente si se hiciera desde cualquier otra institución sería considerado delito y tráfico de influencias).
Y sin olvidar al otro "gran ejército" político-administartivo habilitado en palacetes y cuya principal
labor diaria parece consistir en adivinar como “matar el tiempo".
Pero, dicho esto, que suena a pesimismo y resignación, lo cierto es que conservamos la esperanza, tal
vez consustancial a nuestras creencias cristianas, de que esta cruda, dura y crónica realidad cambie, modestamente intentaremos hacer todo cuanto esté en nuestra mano para que esta nuevo
año 2016 NO SEA OTRO AÑO MAS DE LA
MARMOTA sino el primer nuevo año de la renovación
de la Atención primaria en nuestro país, por
la dignificación del Médico de familia y consustancialmente la del paciente.