Aqui toda la información al respecto: http://www.cadavidaimporta.es/
A pesar de las políticas
de ingeniería social impuestas en los últimos años, que parece han conseguido abducir
o anestesiar moralmente a una gran parte de la población española, otra parte sin embargo sigue creyendo en el valor indisoluble de la dignidad humana y considera-mos un deber, defenderla.
Reclamando para ello un plan de apoyo a la mujer embarazada, frente a la actual situación de discriminación laboral y desprotección social que padece.
Reclamando para ello un plan de apoyo a la mujer embarazada, frente a la actual situación de discriminación laboral y desprotección social que padece.
Reconociendo que la Dignidad humana es intrínseca a toda persona y no depende de las circunstancias, cualesquiera que estas sean: edad, salud, sexo, color de piel, creencias, hallarse dentro o fuera de su país... o "dentro o fuera de su madre".
Y sabiendo también, que no estamos ante nada nuevo, pues durante toda la historia de la humanidad, siempre que se ha justificado la muerte de otros seres humanos y la violación de derechos humanos, se ha utilizado el mismo argumento: "NO SON PERSONAS".... ya sea durante el nazismo, la esclavitud, racismo, terrorismo, machismo, etc.).
Y cumpliendo taxativamente el axioma:
"El fin justifica los medios".
Los médicos -queramosló o no- estamos directamente implicados en este tema:
1-
Porque las políticas de ingeniería social implantadas por el poder político se valen -una vez mas- (al igual que
durante el nazismo) de la Medicina para justificar y ser el instrumento de la "eliminacion" otros de seres humanos, en este caso también "inservibles, inferiores o simplemente
no personas".
2- Porque se induce y conduce
a obrar contra el propio código deontologico medico: el bImilenario y universal Juramento Hipocrático.
3- Porque el
medico subdelega su conciencia ética y por ello su supremacía moral al poder político,
a menudo amoral.
4- Porque consideramos que la madre junto a su hijo "eliminado" son las dos grandes victimas de esta enfermedad social y la sociedad que lo relativiza y justifica, tambien.
Es como si los
bomberos, en lugar de cumplir su función social de apagar fuegos, se les encomienda incendiar casas habitadas por personas "inservibles,
inferiores o que no seres humanos".
Tal vez no es casualidad,
que todo el movimiento en favor de la defensa de la vida y de apoyo a la
mujer embarazada, en nuestro país, esté encabezado por médicos: desde
la dra.Gador Joya, dr. Jesus Poveda, Medicos por la vida, etc...
Y es que, muchos estamos convencidos, de que cuando esta enfermedad
colectiva pase (como pasaron otras, como la esclavitud o el nazismo),
estos heroicos compañeros figurarán en el mismo pedestal que quienes descubrieron
la mejor vacuna o el mas eficaz tratamiento contra enfermedades, hoy incurables.
Y tal vez cuando nuestro
hijos o nietos nos pregunten ¿que hacíamos?, nos gustaría poderles decir: ! Yo
estuve allí y grite ! SI A LA VIDA, !CADA VIDA IMPORTA !
Estas
palabras de tres "obreros de la Verdad" son especialmente luminosas.
El aborto mata la paz del
mundo...Es el peor enemigo de la paz, porque si una madre es capaz de destruir a
su propio hijo,
¿qué me impide matarte? ¿qué te impide matarme?
Ya no queda
ningún impedimento
Teresa de Calcuta
"El
árbol es ya todo lo que vemos: el mástil recio de su tronco, las ramas,
la flor breve y el sabroso fruto, desde antes de romper la costra del
suelo..
Pues
de igual modo, la vida mortal de los seres humanos está en gran manera
escrita, desde antes de nacer, en las entrañas maternas"..
“
Si la convivencia intima de unos meses con otro ser humano, cualquiera
que este sea, deja en nosotros huellas que no se pueden borrar jamás,
aun cuando nuestra conciencia lo olvide
.. pensemos de que calidad y
de que hondura serán los surcos que graba en nuestra anatomía y en
nuestra alma la intimidad religiosa y ferviente con nuestra madre,
durante el tiempo en que vivimos de la propia sangre suya...”
Gregorio Marañon
Gregorio Marañon
"Lo mas grave, desde el punto moral, que ha acontecido en el siglo XX, es la aceptación social del aborto provocado".
Julian Marias