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Boceto de Elías Salaverría, en el que aparece el Dr. Marañón pasando visita en el Hospital Provincial |
Se trata de caracteristicas o facetas que tal vez poseemos todos
los médicos, en mayor o menor proporción, relacionadas quizás
con la etapa madurativa profesional.
La caracteristica fundamental de los primeros (médicos sabios o sabias) son: la modestia, la
tolerancia y la naturalidad o cercanía en el trato.
Por el contrario en
los segundos (médicos sabiondos o sabiondas), son: la inmodestia, la impostura y la rigidez.
Los primeros: tienen pocas certezas y muchas dudas.
Entre otras cosas porque saben que la Medicina es una ciencia inexacta
y la enfermedad es un proceso que obedece a factores generales objetivos y tambien a factores
variables dependientes de cada paciente o circunstancia, no por ello pierden el
entusiasmo ni abandonan el estudio, para tratar de conocer mas y mejor esos
factores genéricos.
Los segundos: tienen muchas certezas y pocas dudas, sus creencias se
transforman en dogmas automáticamente, a veces apoyándose en un simple articulo
de revista, escogido.
Suelen amar los protocolos porque estos transforman mágicamente la Medicina en
una ciencia exacta.
Los primeros (m. sabios/as): saben que su trabajo -como todos- suponen cuotas de poder
que la sociedad otorga, pero que ese poder es
prestado y a veces hay que devolver a precio de usura, en forma de
generosidad y tolerancia.
Por el contrario, los segundos (m. sabiondos/as): creen o sienten que el trabajo es de su
propiedad y les otorga un poder que
deben ejercer como patrones o capataces.
Los primeros: no necesitan de signos externos para hacer sentir y
sentirse médicos, (como insalubres collares estetoscopicos, etc,.., y a veces ni la bata.)
A los segundos, por el contrario les gusta adornarse de múltiples artificios externos y suplementar su titulo de médico con otros
muchos titulos meritorios a modo de medallas, preferiblemente
que suenen en ingles.
Los primeros: nadan contracorriente y a favor del verdadero progreso, porque
saben que la Dignidad del ser humano es eterna y universal, y no
depende circunstancias como: edad, salud, color de piel, creencias, estar dentro o fuera de su país...o de su madre.
Por el contrario los segundos: siempre nadan a favor del viento, aunque
aparenten ir contracorriente.
Suelen abrazar “los protocolos ideológicos” incluidos en los pack políticos,
especialmente si llevan la etiqueta de "progresista", aunque para ello tengan que ir
contra el Código deontológico médico eterno y universal.
Llegando a justificar y asumir la eliminación de seres humanos por criterios eugenésicos
(personas "inferiores", "inservibles" o "inconvenientes"), aunque aparenten sensibilidad
para según cual circunstancia o colectivo desfavorecido.
Unos, los primeros (m. sabios/as): : son esponjas que absorven y comparten todo cuanto recogen, como semillas, porque saben que la ciencia es universal, en continua busqueda de los enigmas que la naturaleza nos ofrece.
Y otros: los segundos (m. sabiondos/as), son almacenes de datos cientificos, que exponen como escaparates, de manera exhibicionista.
DD- Hay que diferenciar: la rigidez, de la pasión que va unida al caracter humano, pues esta pasión tiene más
que ver con el entusiasmo, que como alguien dijo, siempre es signo de salud espiritual.
Una vez mas, nos iluminamos con estas palabras del maestro Gregorio Marañón:
¿Que es la clinica?
El juicio clínico se compone de tres factores:
intuición, empleo de los
metodos cientificos auxiliares, y rigurosa moralidad.
Si me preguntaran la
categoría de estos tres factores, diria que el principal es el tercero, y el
ultimo el segundo.
¿ Cuales son
las condiciones o aptitudes que debe poseer y cultivar el clinico?
La vocación y el estudio, como
cualidades positivas; la modestia, la ausencia de pedantería, como
cualidades negativas.
Todas las lacras de nuestra Medicina pueden reunirse en las dos grandes manifestaciones del dogmatismo: una, práctica, el profesionalismo, y otra, teorica, el cienticifismo..
Consiste el profesionalismo en el intento, deliberado o no, de convertir en lucartiva, en fuente de riqueza una profesión que, aunque legítimamente remunerada, debe siempre tener sobre su escudo el penacho del altruísmo..
Por cientificismo se entiende, en el caso mejor, la fe excesiva en todo lo que viene de la ciencia; y, en el caso peor, se llama así al manejo intencionado de todo lo que no lo es, para pasar por hombre de ciencia y aprovechar indebidamente la prerrogativa que este título supone ante la gente vulgar”.
“Mas lo que suelen olvidar los médicos es que el progreso de su ciencia no depende solo de la difícil experimentación, sino también de la simple observación del enfermo, cuando se hace no como una rutina, sino con espíritu científico”.
Del libro: La Medicina y nuestro tiempo, G. Marañon.