“No me cabe duda que el viejo mundo recibirá de América la energía que lo vita lice y, posiblemente, la luz que lo redima”.
Gregorio Marañón
Si observamos con detenimiento la realidad de la sociedad española, vemos que en las últimas dos décadas se ha producido un profundo cambio social que se refleja tanto a nivel fisionómico como sociológico.
Basta sentarse en cualquier lugar donde concurra mucha gente, ya sea en calles, centros comerciales, sociales, etc., para comprobar que han cambiado caras y aspectos que denotan procedencias múltiples, desde la Hispanoamérica hermana, pero también de Marruecos, antiguos países del este de Europa, China, etc.
Y frente a quienes lo ven como una amenaza o peligro, otros lo vemos más como una riqueza y una esperanza, -sin obviar que lamentablemente también se cuelan elementos antisociales que habría que evitar y controlar-.
A la inspección simple se observa una mayoría social
autóctona envejecida sin recambio generacional, en parte debido a la baja natalidad y también derivado
del aborto, esto es por la eliminación de seres humanos cuando están en el
vientre de sus madres, aceptado ya como algo natural.
De hecho la palabra "entrañable" ha perdido ya su significado.
Y las megatiendas de productos infantiles: ropa, juguetes, cuidado de bebes, etc. han sido sustituidas por las de cuidado de mascotas, lo que habla por si solo.
A nivel laboral podríamos decir que más
del 90 por ciento de los servicios básicos de asistencia, son realizadas por inmigrantes.
Y asimismo el 95% de lo que comemos, bebemos, nos arreglan, etc.
Casi todos los sectores productivos asistenciales, ya sea en hogar, campo,
restauración, así como el cuidado de ancianos, niños, enfermos crónicos, mantenimiento
de estructuras, etc. esta realizado por población de origen inmigrante.
Son trabajos a
menudo muy duros, que no pocas veces se llevan la salud y la vida de muchas personas.
Podríamos decir simplificadamente, que los trabajos que "manchan las manos" están realizados por personas de origen extranjero, mientras
que "los de sillón", lo están más por la población autóctona.
Unos conllevan más
riesgos para la salud y su salario es mas precario, y los otros
son más confortables y están mejor remunerados.
El ejemplo de unos: seria un trabajo de albañil, técnico
de mantenimiento o cuidadora; Y el de los otros: bróker financiero o de especulación
inmobiliaria.
La población de origen hispanoamericano posee en general, unos valores singulares:
calidez, espíritu de sacrificio y de servicio, empatía, visión común de la vida, etc. y por ello son mas requeridos para los trabajos de confianza: cuidado de personas, mudanzas, talleres, reparto y otros servicios esenciales.
Y aunque algunos puedan
parecer distintos físicamente, culturalmente son una misma cosa que los autóctonos.
El resto de procedencia cultural dispar, parece claro que son
y serán cada vez mas integrados socialmente, por la propia
idiosincrasia inmutable de España.*
*Los menores migrantes en España se sitúan a la cabeza deEuropa en integración socioeducativa
Un estudio de la Universidad Comillas concluye que la mayoría se siente feliz
en su colegio y apoyado por profesores y compañeros
