Se trata de una realidad incuestionable que hemos podido constatar en muchos
pacientes en nuestras consultas, sobre todo en pacientes con trastornos ansioso-depresivos casi siempre reactivos,
incluso con manifestaciones maniacas, fobicas u obsesivas: Y es la mejoría y/o curación de dichos trastornos a través de la confesión con la ayuda del sacerdote.
Tiene esta "terapia" la singularidad de que es gratis, se puede acceder tantas veces
como lo demande, y el enfoque del tratamiento es etiologico, lo que a nuestro juicio y objetivamente suele ser lo
mejor para afrontar las grandes o pequeñas crisis emocionales o existenciales de la vida:
desde conflictos familiares, laborales, personales etc..
Se trata de una función, la de los los curas, hoy en día un tanto denostada e
infravalorada, pero sin duda muy eficaz y a nuestro juicio muy superior a la que
ofrece la Psicología que puede enseñar a manejar las emociones, lo que no
deja de ser un tratamiento puramente sintomático o patogenico;
Pero no llega al tratamiento etiológico, muchas veces incomprensible desde la racionalidad, algo que si logra el sacerdote
través de la confesión, dando un sentido trascendente al sufrimiento humano, ese que ofrece
el cristianismo y mas en concreto el catolicismo, lo que por sí mismo resulta terapeutico o curativo,
algo que ya entrevió Erick Fromm en su libro "En busca del sentido" .
El hecho de que este servicio se ofrezca gratis, desde la generosidad y entrega testimonial del sacerdote, parece que aumenta considerablemente su eficacia terapéutica.
*(Ni que decir tiene que la descalificación actual de curas - aun siendo la mayoria ejemplares- y de la Iglesia en general, por parte del poder político, es la 1ª lección para la manipulación electoral de las masas, para ello se hace uso de casos aislados deleznables, probablemente significativamente menores que los de cualquier otro colectivo incluido el medico, pero también maestros, policías, jueces, entrenadores deportivos etc..)
Estas palabras del maestro Gregorio Marañon, nos iluminan una vez mas :
"La Medicina tiene dos aspectos que la colocan en el rango de las que exigen una vocación de superior categoría, aquella que hemos comparado con el amor, y que por tanto requieren atracción intransferible hacia su objeto, espíritu de sacrificio y aptitudes específicas.
Estos dos aspectos son: su práctica gratuita y entrañable en los pobres (y quizá en los que no lo son), tantas veces comparada con el sacerdote, y su estrecha alianza con la investigación científica pura"
Estas palabras del maestro Gregorio Marañon, nos iluminan una vez mas :
"La Medicina tiene dos aspectos que la colocan en el rango de las que exigen una vocación de superior categoría, aquella que hemos comparado con el amor, y que por tanto requieren atracción intransferible hacia su objeto, espíritu de sacrificio y aptitudes específicas.
Estos dos aspectos son: su práctica gratuita y entrañable en los pobres (y quizá en los que no lo son), tantas veces comparada con el sacerdote, y su estrecha alianza con la investigación científica pura"
" El medico no sabe de los hombres mas que cualquier otro
conocedor de la vida.
Lo he dicho muchas veces: nada hay más impersonal que la
enfermedad, como no sea el pecado; y, por eso, el médico que solo ve en los enfermos
los síntomas -como el confesor que solo se entera de los pecados de su
penitente - está muy amenazado de no saber casi nada de cómo es, en verdad el
que sufre del cuerpo y el alma"
Cuanto trabajo nos quitarían y cuanto aliviarían de sobrecarga nuestras consultas, si volvieran a recurrir a la confesión muchos "pacientes"
ResponderEliminarAsí es compañero-a
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