Tal vez uno de los errores mas frecuentes que cometemos cuando analizamos la sanidad en nuestro país, es creer que los únicos protagonistas del sistema sanitario somos los médicos y los pacientes.
Y es que hay que admitir, que el acto médico siempre es un hecho trascendente y sublime en el que dos seres humanos interactúan: uno como ser sufriente y otro como hermano que trata de aliviar, curar o compartir ese sufrimiento.
Pero este acto, aun siendo necesariamente bidireccional, esta condicionado directa o indirectamente por un sinumero de estructuras, muchas de las cuales se podrían catalogar literalmente como parasitarias, pues consumen una gran parte de recursos y a menudo solo interfieren, dificultan y degradan el acto médico
Y ello al margen de las personas que las componen, pues debemos reconocer la calidad profesional y humana así como la vocación de servicio de la mayoría, especialmente del personal sanitario y administrativo de los centros de salud y hospitales.
Podriamos enumerar las estructuras en los diferentes estamentos, comenzando por las "de arriba":
1. Con miles de políticos que comen del pastel de la sanidad: con sus megasueldos, megacoches oficiales (incluido chofer), etc.., y megadespachos, que comparados con el despacho oval de la Casa blanca este parecería un chamizo.
Pero todos parecen compartir una misma ocupación y preocupación: que es intentar adivinar cada dia, como matar el tiempo.
2. Todo un ejercito de personal en gerencias y subgerencias sanitarias: directores, subdirectores de area y de subarea, jefes subjefes de seccion y de subseccion, etc.. con sus megasueldos, megadespachos ...., cada uno de los cuales con su batallon de secretarias y subsecretarias.., muchas de las cuales profesionales del legendario "venga-usted-mañana".
Pero como en la estructura anterior, todos parecen coincidir en una misma ocupacion y preocupación: que es intentar adivinar como matar el tiempo.
3. Toda una estructura en Centros sanitarios: un ejercito de personal administrativo, semiadmintrativo y paradministrativo, sanitario y parasanitario, informático, etc, que parecen compartir la misma ocupación y preocupación que los anteriores.
Todo ello dibuja un sistema sanitario aberrante, diseñado para la manipulación electoral de las masas, en el cual el médico de atención primaria, asume ademas de su labor clínica -la única para que esta capacitado profesional y socialmente- el trabajo de administrativo, celador, enfermeria, el de informatico.. y hasta el de los gestores (los de los despachos ovales) que con su conocida alergia a la responsabilidad, se lavan las manos pasandoles incluso tambien la pelota de su tarea de gestion economica y administrativa de los Centros.
El espectaculo grotesco y perverso, único en el mundo, de los Centros de salud españoles, en los que los médicos están como animales de carga maltratados, atendiendo (sin descanso y sin tiempo, ni para ir al baño) consultas de mas de 50 pacientes, uno cada 5 minutos (incluidos niños, y pacientes graves o urgentes), al lado de consultas de enfermería en las que se atienden 4 o 5 pacientes al dia y a menudo con salarios semejantes, o el del resto de personal en actitud no menos ociosa, recuerda cada vez mas las imagenes de la esclavitud y hasta las mas recientes pesadillas del nazismo.
Todo ello sin embargo tiene un coste social y personal en la salud y seguridad del paciente y del médico.
Y es que debemos recordar, una y mil veces, que la actual degradación del acto médico nos afecta a todos, pues conlleva necesariamente una desvalorización de la salud, de la vida y de la propia dignidad humana, y representa un paso atrás en el progreso social.
Pero hay que admitir que sirve para mantener el escenario teatral de caracter politico-electoral, de la barra-libre sanitaria, como el argumento principal de una de los mas repugnantes espectaculos de manipulación de masas de las democracias inmaduras o enfermas.