Hay momentos que uno siente profundo
dolor, vergüenza, repugnancia y
otros sentimientos negativos difíciles de expresar, cuando se
comparte profesión con quienes utilizan el mismo nombre para mancillar
nuestra noble labor de médicos, en este
caso para asesinar vilmente a un niño, cuyos padres tratan desesperadamente
de salvar.
El niño padece una enfermedad rara neurologica de etiologia -por ahora- desconocida y se llama Alfie Evans pero lo mismo se podria llamar como nuestro hijo.
Y eso creemos que es lo que está pasando con el intento de asesinato cruel , vil , y repugnante de un niño indefenso al que no se permite sobrevivir y huir del corredor de la muerte de un hospital, todo ello con la anuencia y colaboración de médicos, jueces y políticos que configuran un Estado Orweliano.
El niño padece una enfermedad rara neurologica de etiologia -por ahora- desconocida y se llama Alfie Evans pero lo mismo se podria llamar como nuestro hijo.
Y eso creemos que es lo que está pasando con el intento de asesinato cruel , vil , y repugnante de un niño indefenso al que no se permite sobrevivir y huir del corredor de la muerte de un hospital, todo ello con la anuencia y colaboración de médicos, jueces y políticos que configuran un Estado Orweliano.
Parece que se repite Auswich, y seguimos
compartiendo profesión con doctores Méngüeles hoy en dia.
Paradójicamente o “milagrosamente”
ese niño, que los padres tratan desesperadamente
salvar y huir de Auswich, y al que los “médicos”
daban unos minutos de vida si se suspendía la respiración asistida, sigue respirando por sí
mismo después de más de 24 horas e hidratándose vía oral.
Pero sigue secuestrado impidiéndose a los padres proporcionarle oxígeno, alimentos y poder escapar, todo ello a pesar de que Italia le reclama para salvarle en otro hospital, habiéndole otorgado su nacionalidad y se han desplazado varios médicos y avion medicalizado para facilitar su derivación y procurar otros tratamientos.
Desde aquí nuestras oraciones y nuestra gratitud
al Gobierno italiano, al polaco, etc. y a todos los que
se movilizan para salvaguardar la Dignidad humana.
MAS INFORMACION , ENLACES:
Gracias por tu sensibilidad para captar el profundo significado de este caso, que esta al margen de creencias religiosas o ideologías politicas como se quiere hacer ver. Como tambien se quiere hacer ver y se presenta en las noticias como un caso terminal, siendo un caso de E. de origen desconocido.
ResponderEliminarLo que esta en juego es el valor de la persona que es inservible para el Estado como tantos enfermos asi catalogados y abre la puerta a caminos peligrosos ya superados en la historia.
Por lo demas resulta monstruoso y cruel que el "Estado" impida a unos padres intentar salvar la vida de su hijo ( sin coste para el mismo) y los obligue a presenciar su muerte. Creo que la comparación con el nazismo no puede ser mas precisa.
Gracias Isabel.
ResponderEliminarAsí es, como siempre, se trata de justificar o encubrir utilizando sesgos políticos o religiosos para descalificar las reacciones , incluso se recurre tb a la falsedad diciendo que es una enfermedad terminal. Respecto a la manipulación de la prensa y los poderes que la controlan ya nada sorprende, pero la implicación activa de los médicos en este caso, resulta especialmente dolorosa y es grave.
Pero no es la primera vez que la Medicina colabora con la barbarie, basta visitar el blog “Medicina y holocauto”, para comprobar como muchos médicos (casi la totalidad en Alemania) colaboraron, por activa y por pasiva, en labores de exterminio.
En este caso la capacitación moral y científica de los “médicos” que han atendido al pequeño Alfie y que han hecho el informe que justificaba su asesinato, esta retratada por los hechos, incluso debería tener consecuencias penales: Ni siquiera habían comprobado que el niño podía respirar solo.
Por otra parte, la evolución de las enfermedades EOD, especialmente en los niños, es más que sorprendente, desde niños que nacen seropositivos y se hacen seronegativos, con parada c-r de minutos que crecen sanos, etc., incluso algunos con enfermedades neoplásicas teóricamente mortales y que salen adelante con tratamiento.