Todos
sabemos que -al igual que los objetos- las palabras tambien pueden
poseer belleza, tanto por su sonoridad y armonía, como asimismo por su
significado y trascendencia.
Y
una de las palabras que conlleva mas de estos elementos portadores de
belleza y verdad es, a nuestro juicio, la de "MEDICO DE FAMILIA".
La primera de ellas, la de "Médico": con su raíz etimológica, resumida en el verbo latino medeor, cuyo significado primario es cuidar, tratar, y de ahí aplicar remedios (medelae) o curar.
Pero lo que marca más, los "quilates" o la trascendencia personal y social de la profesión médica, es sin duda, el "titulo" "de Familia": un apelativo nominal que tienen el privilegio de poseer y compartir socialmente tres personas: el padre, la madre y el médico.
Con todo lo que conlleva esta expresión en el ser humano de: protección, prevención y prevision pero sobre todo de confianza incondicional.
Tal vez esto es asi, porque los tres comparten de una u otra manera, muchos de los mismos principios básicos de la Medicina, que son estos, bellamente expresados por el maestro del humanismo médico Dr. Gregorio Marañón:
Si ser médico es entregar la vida a la misión elegida.
Si ser médico es no cansarse nunca de estudiar y tener todos los días la humildad de aprender la nueva lección de cada día.
Si ser médico
es hacer de la ambición nobleza; del interés, generosidad, del tiempo
destiempo; y de la ciencia servicio al hombre que es el hijo de Dios.
Si ser médico es amor, infinito amor, a nuestro semejante.
No deja de sorprenderme tu hipersensibilidad para percibir y expresar desde lo mas sublime a lo mas deleznable de la realidad profesional, sanitaria y social.
ResponderEliminarGracias por este bendito blog que creo resulta tan útil especialmente a los médicos en formación.
Gracias por tus generosas y por ello un tanto exageradas palabras, en realidad todos somos portadores de los principios, valores y enseñanzas de los maestros, y en este blog como veras, siempre necesita de las muletas de ellos, especialmente de G. Marañon.
ResponderEliminarResulta muy gratificante que consideres que lo que aquí expresamos resulta útil para los médicos en formación. Ojalá fuera así.
Por lo demás intentamos mantener un afán permanente por explorar todo lo que percibimos tenga verdad y llegar a las raíces del humanismo medico, intentando conservar una sana rebeldía ante lo que consideramos injusto.
Ni siquiera esto es mérito nuestro pues considero que cada uno tenemos unas singularidades donadas, y que debemos poner al servicio de los demás.
En mi caso y -dicho sin complejos- también desde convicciones cristianas