Este dicho, que ya refirio Cervantes en el Quijote, como todos, suelen encerrar una gran dosis de sabiduria y verdad, y tambien como muchos, van por delante de la misma ciencia pues la observacion de la realidad no es patrimonio de ella, de hecho esta evidencia "cientifica" es algo que reconocen muchos ancianos.
El cambio de habitos sociales ha generado la aparicion endemica de LA OBESIDAD, que según la OMS, se trata del problema de salud mas importante a nivel mundial en países desarrollados y en vías de desarrollo, no solo por si misma sino tambien por ser puerta de entrada de un gran numero de enfermedades limitantes, invalidantes o mortales
Hoy en dia, debido a la falta de una politica de conciliacion de la vida familiar y laboral, hace que la cena suela ser la comida mas copiosa del dia, en parte porque es cuando se puede reunir toda la familia.
Y es que, la alimentación en el ser humano, al contrario que en los animales, no es solo una necesidad fisiológica sino que es fundamentalmente un acto social: alrededor de una mesa se forjan cimientos y alianzas, la primera la de la familia pero también de amistad, trabajo, homenajes, convivencia y hasta religiosas...
Recordemos que hasta el Mensaje eterno, dirigido a la Humanidad de todos los tiempos, se hizo alrededor de una mesa y a traves del acto simbólico de la comunión, que es “comer en unión”.
Por medio de la alimentación se transmiten sentimientos: el primero el amor, lo aprende ya el niño antes de nacer a traves de su madre, mas tarde en la lactancia y luego en la comida en familia, que es algo mas que ingerir alimentos.
El desequilibrio en la distribución de la ingesta calórica, con elevación durante la noche y reducción en la mañana produce un cambio del ritmo circadiano, y la aparición del denominado Síndrome del comedor nocturno: que esta caracterizado por la triada: 1- Anorexia matutina 2- Comer compulsivamente en la noche y 3-Insomnio.
Mediado todo ello, a nivel bioquímico, por una hiperinsulinemia y una mayor resistencia a la insulina, como elementos desencadenantes del complejo mecanismo neuroendocrino de la obesidad.
El tratamiento para que sea eficaz y sobre todo permanente, deberia ser en la medida de lo posible, fundamentalmente etiopatogénico, mediante un reajuste horario de la ingesta calórica, además de su reducción, y mediante el ejercicio físico de intensidad media.